¡Lunes bridal atrasado!
Hoy publicamos un vestido de novia de lineas sencillas pero con un punto muy chic, un cinturón de flores de plata ideal, un ramo de lavanda y peonias maravilloso y una decoración campestre sin resultar nada artificial que seguro os encantará.
El vestido
Marta nos cuenta que la búsqueda del diseñador perfecto para su vestido de novia fue una aventura:
«Lo recuerdo como unos días maravillosos;concerté varias citas para un día y allí nos presentamos, llenas de ilusión, mi suegra, mi madre y mi hermana, y lo pasamos realmente bien..»
La novia concertó citas con varios diseñadores pero lo tuvo bastante claro :
«María de Oh que Luna! me hizo sentir especial con 4 telas, un aplique espectacular y una blonda preciosa de encaje para el velo . Me vi entrando en la iglesia»
Marta tenía muy claro su vestido:
«Quería que fuera cerrado por delante y con la espalda en pico bastante abierta. Además ,me apetecía marcar la cintura y llevar un aplique a un lado»
Los detalles del vestido
El vestido llevaba unas flores color plata, un trabajo artesanal de Carmen María Mayz .
La tela del vestido era una de las favoritas de «nuestras novias» :
«Crêpe de seda e con movimiento y una caída preciosa…»
Pelu y maquillaje
Marta no se complicó la vida y decidió que María Arroyo, su peluquera de toda la vida le hiciera un moño bajo sin ninguna parafernalia:
«Me hizo un recogido precioso que encajaba a la perfección el tocado.»
Para el maquillaje, confió en MAC:
Mirada en tonos dorados y tierras y labios naturales
El camisón que llevaba Marta con una tirita de encaje es también de Oh que Luna!
Las joyas
Sentimentales:
El anillo de pedida que Jaime diseñó para Marta:
«En oro color mate con un brillantito, me encantó…y me encantó que eligiera el diseño él…me sorprendió y por supuesto, acertó»
También, llevó unos pendientes de brillantes que regalo el novio y para cumplir con la tradición una pulsera que le prestó su suegra (era de la pedida de la abuela de Jaime).
El tocado y el velo
Una peina delicada y con un toque retro Carmen María Mayz.
El velo de Oh que Luna ! con caída y una blonda de encaje gris muy suave.
El ramo
Peonías un poco abiertas y lavandas para darle un toque más campestre
(floristería La Jara, de Valladolid.)
Los zapatos
Unos peep toes glitter de Jimmy Choo.
De camino a la iglesia
La iglesia
La iglesia estaba decorada con margaritas, paniculata,eucalipto, flores malvas y moradas..
(floristería La Jara, de Valladolid.)
Marta y Jaime se casaron en el Monasterio de la Santa Espina, un sitio realmente precioso .
El aperitivo
Se casaron en la finca La fuente de los ángeles, en Valladolid.
Los novios lo tenían muy claro, el apetitivo sería el auténtico protagonista:
» Para nosotros es lo más divertido, y pusimos distintos bodegones para acompañar el cóctel de carabineros, huevos de codorniz con trufa, jamón y por supuesto no podía faltar una barra de mojitos, que me encantan.»
El sitting
A los novios les encanta viajar, así que tenían muy clara la temática para los meseros:
» Cada mesa, llevaba el nombre de ciudades que habíamos visitado juntos.»
Toda la papelería de la boda y los meseros fue trabajo de Laura de by In Design.
La decoración de las mesas
Rositas de pitiminí color té y mucho verde, simplemente perfectas…
Iluminación
Detalles
También, pusimos una mesa con fotos de esos viajes, hechas postales para que nos dejaran su mensaje los invitados y las dejaran en un buzón…es un recuerdo precioso para los novios.
Mojito time
Las invitadas más especiales
La hermana de la novia llevaba un vestido de Panambi, color buganvilla.
María, una de las intimas amigas de la novia, fue una gran ayuda en la organización y preparación de todos los detalles e la boda.
Llevaba un dos piezas verde esmeralda de de David Christian .
El ambientazo
Just married
«Recuerdo el día de nuestra boda como un día mágico e inolvidable…donde disfruté al máximo de cada minuto…y sentía que no podía ser más feliz.»
Fotografía Jimena Roquero