Hoy publicamos una boda con mucha historia.
En 2015 publicamos una sesión de fotos de la que nos enamoramos al instante. Pensamos en un principio que era una boda de verdad y no un shooting. Pero la química de Marta y Mauri traspasaba la pantalla (pincha aquí para el post de la boda del tipi con estrellas) . Años después, nos encontramos con una gran sorpresa al encontrarnos la» boda de verdad de Marta y Mauri «de la mano de Chachacha photo.
La novia
«El día me encantó, desde el principio hasta el final. Pensé que en mi casa la gente estaría un poco nerviosa, porque soy la mayor y la primera que se casa, pero al revés. Mis hermanos y mi padre se pasaron el día en la piscina, tan tranquilos mientras yo me maquillaba, y con los preparativos la verdad es que nos reímos mucho.»
Como muchas de vosotras, encontrar los zapatos perfectos es una de las tareas más difíciles para las novias. Marta se los hizo a medida y nos cuenta que bailó con ellos hasta el amanecer.
(Unique shoes)
El ramo era una mónada absoluta con rositas de pitiminí de tallo largo.
(Cruz de A Floreria)
El vestido
«La verdad es que yo no tenía ninguna idea en la cabeza de como sería yo como novia y ni siquiera le había dado muchas vueltas. Lo único que tenía claro, es que quería llevar el velo que mi abuela llevó en su boda, y como es bastante especial, estaba muy dispuesta a que el vestido tuviese que ser de una forma u otra en función del velo.»
(Inuñez)
El velo era una parte fundamental del look de Marta, fue el mismo con el que su abuela se caso.
Una pieza super especial de los años 40, un casquete de encaje con flores a los lados, cosido a un velo doble de tul.
Las joyas.
Marta es una enamorada de las joyas , sobre todo de aquellas que tienen valor sentimental:
«El broche que llevaba en la cintura, me lo regaló mi padre un par de días antes de la boda y no me pudo gustar más. También llevé una pulsera de brillantes que me regaló mi madrina cuando le dije que me casaba. Ella la heredó de su abuela (mi bisabuela). Por último, me puse también unos pendientes de tres brillantes y un anillo de meñique que mi madre se ponía casi todos los días y me recuerdan mucho a ella, así que todo lo que llevaba, a parte de gustarme, era especial para mi.»
El novio
Mauri llevaba camisa y chaqué gris marengo, de Swing Madrid .
La corbata fue un regalo de su amigo Álvaro y los gemelos se los regaló su tío .
Los últimos momentos de soltera
La Iglesia elegida fue la de Santa María de Bayona.
Si quiero
Los niños estaban ideales con unos vestido de lino verde grisáceo y pantalón a juego
( Trixi Kids y las coronas de Moncollier)
De camino al pazo
La celebración tuvo lugar en el Pazo da Touza, en Nigrán:
«Se encargaron de todo, fueron siempre encantadoras y no pusieron ni una pega a ninguna de nuestras ideas. Yo conozco de siempre a las chicas que lo llevan y eso lo hizo todo muy cómodo y muy fácil, no puedo ponerles un pero»
Invitadas con estilazo
La cena
La cena fue tipo coctail:
«Como Mauri es de El Puerto de Santa María, muchos de los invitados eran andaluces. Mauri quería que la cena fuese muy gallega, así que montamos puestos con pulpo a la gallega, navajas y zamburiñas.»
Como nos cuenta la novia, el Pazo era tan bonito que no necesitaron mucha decoración:
optaron por centros de flores coloristas y frescos.
El primer baile
Just married
Chachacha photo
Os dejamos el vídeo ideal de un par de medias