Hoy publicamos una boda preciosa que se celebró en mi amado norte, Raquel y Javier tuvieron una boda muy bonita en la iglesia de Nuestra Señora del Carmen y el Palacio San Joseren. Raquel llevó un diseño precioso de Sophie et voilà, ella buscaba un vestido sencillo pero con ciertos “toques”pero sin ser excesivo. Quiso hacer un guiño a la tierra de su madre y de la familia de su marido y optó por un moñito con trenzas con aires valencianos. Lo adornó con un broche muy especial que perteneció a su abuela materna. Además, la piedra coincidía con la del anillo de pedida que le regaló Javier. Para el ramo, escogió una opción super campestre que se alejaba de las opciones tradicionales. Los pendientes fueron un regalo de la suegra de Raquel, una joya sentimental que pertenecieron a su abuela.
Para las fotos contó con Maorlan fotografía porque los novios buscaban fotos naturales, cercanas y sobre todo querían sentirse cómodos en su gran día. Es clave entrevistarte con el fotógrafo de tu boda, investigar el tipo de trabajos que hace y su mirada fotográfica para saber si estáis en la misma sintonía. Es verdad, que en el caso de Maorlan los novios se enamoran de su cuidada galería de Instagram y el boca a boca también le hace la mejor de las publicidades.
¡ Las sandalias de la novia!
En color arena y con tacón finito…
¡Los pendientes regalo de la suegra de Raquel¡
¡ El moñito con guiños a Valencia y el broche familiar!
¡ Los últimos momentos de soltera!
¡ Maravilla de espalda!
¡ El vestidazo de novia, sencillo con un twist!
¡ De camino a la iglesia!
¡ Sí quiero!
¡ De camino al Palacio San Joseren!
¡ Invitadas a todo color!
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