La novia del ramo rosa
Lunes bridal
Hoy publicamos una boda preciosa, una novia con un vestido mínimal, un ramo ideal en rosa suave y una boda decorada con mucho mimo por la novia.
El vestido
Belén conoció a David Christian un par de meses antes de saber se casaba:
«Cuando lo decidimos, tuve claro que quería que hicieran mi vestido, no me hizo falta visitar ningún otro sitio.»
El vestido era de lineas sencillas de manga larga, escote cerrado y un cinturón de pasamanería.
Los detalles del vestido
Era un vestido blanco roto de crêpe de seda con un cinturón en un tono especial:
Oro viejo.
peinado y maquillaje
La novia tenía muy claro el peinado para el día «b«, una una trenza deshecha (María Muñiz, de Avilés).
Del maquillaje se encargó Raquel de Pinceladas:
Belén quería marcar un poco la mirada, no le apetecía un maquillaje de novia excesivamente natural con efecto cara lavada.
Las joyas
Todas muy sentimentales:
«Una gargantilla y el solitario que fueron regalo de Guille»
Para cumplir con la tradición de llevar algo prestado, Belén se puso unos pendientes de su madre de brillantes.
El anillo de pedida que le regaló Guille nos chifla:
El clásico modelo Trinity de Cartier
El tocado
Un tocado de flores pequeñitas en tonos oro de Suma Cruz y una mantilla española regalo de su madre.
Aquí podéis verla más de cerca
Los zapatos
Los zapatos los encargó en David Christian:
En piel de pitón en un tono nude y super cómodos.
El ramo
El ramo nos encantó:
Estaba hecho con unas flores muy especiales que se llaman astilbe rosa (Pando floristas.)
Para destacar el color del ramo, decidió pintarse las uñas de granate.
El novio
El novio llevaba chaqué azul marino, con chaleco tipo tartan en tonos rojo.
La corbata en verde botella con motas azul marino.
La iglesia
Se casaron en una iglesia muy coqueta y pequeñita, la Iglesia Vieja de Sabugo en Avilés.
La música fue muy emocionante para los novios:
» Un cuarteto de cuerda que tocó las canciones de nuestra vida.Yo entré en la iglesia mientras sonaba la canción con la que Guille me pidió matrimonio, fue muy emocionante, porque fue una sorpresa para él.»
A la salida de la Iglesia, les esperaban unos gaiteros para tocar «Asturias patria querida».
El sitio
La celebración fue en el Hotel Marqués de la Moral en Naveces.
El sitting
La novia se encargo de hacer un sitting con aires asturianos:
«Botellas de sidra, manzanas, flores campestres, cestos…»
Aquí podéis ver más de cerca el protocolo de las mesas con pinzas
Las mesas
A Belén le hacía mucha ilusión preparar todos los detalles y decoración de la boda.
Se encargó de personalizar tarros de cristal con tela de arpillera y cuerda de cáñamo para dar un toque campestre a la mesas. Estaban decoradas con paniculata, margaritas, botones verdes…
Para los meseros utilizó bastidores de madera bordados por ella.
Las minutas estaban colocadas en bolsitas de papel kraft con un sello personalizado con las iniciales de los novios y una ramita de lavanda.
Detalles
Belén preparo un córner con maletas antiguas que tiene en su casa lleno de:
«Alpargatas y pashminas que dejamos a las invitadas por si les dolían los pies o hacía frío».
Photocall
El photocall estaba situado en un sitio estratégico y con mucho encanto:
«Lo pusimos debajo de un hórreo, con un sofá y una cómoda antiguos. Pusimos un telón de tolie de jouy, combinando con la parte de atrás de los bastidores donde iban bordados los números de las mesas. En los cajones de las mesas pusimos disfraces para que durante el baile los invitados complementasen sus looks».
Las sorpresas
A los doce de la noche, todos los invitados salieron al jardín para disfrutar de una gran sorpresa:
Los amigos de los novios contrataron un espectáculo de fuegos artificiales.
Just married
¡Von voyage!
Las fotos son de Pelayo Lacazette